¿Qué tipos de puente para guitarra hay?

Publicado el

Es posible que no sea la parte en la que más te fijas cuando te compras una guitarra, pero el puente de la guitarra es una parte esencial para que tu instrumento se mantenga afinado, sea más cómodo de tocar, te permita hacer determinados efectos e incluso mejorar el sustain y el sonido. En este artículo repasamos los principales tipos de puente para guitarra y hablamos de sus ventajas y desventajas. Para que lo tengas en cuenta ;-) 

Cada parte de la guitarra aporta su granito de arena a la hora de generar el tono. Desde el tipo de maderas hasta el último tornillo afectan en mayor o menor medida al tono final. Hay componentes como las pastillas o la madera que aportan mucho al sonido y hay otras partes que, sin ser su aportación principal, también afectan al sonido final. 

El puente es una de estas partes. Su función principal es la de mantener la tensión de las cuerdas, pero también contribuye al mantenimiento de la afinación y dependiendo del tipo, también contribuye a la expresividad permitiendo generar determinados efectos, como el tremolo, de manera manual. Y por supuesto, también aportan su granito de arena al sonido final. En este reportaje nos vamos a centrar en los puentes para guitarra eléctrica. 

En resumen, los tipos de puentes para guitarra eléctrica más comunes son:

  1. Fijo: Una barra de metal que queda fija y no se puede mover.
  2. Tune O Matic: A la barra fija se le añade una segunda barra rompe el ángulo de las cuerdas para generar más sustain.
  3. Tremolo: La barra metálica se puede mover ligeramente para permitir el efecto vibrato.
  4. Vibrola: Un tipo de tremolo ‘vintage’ que a través de muelles permite el efecto vibrato.
  5. Flotante (Floyd Rose): La barra ‘flota’ sobre el cuerpo permitiendo el mayor grado de movilidad.

1) Fijo (Hardtail / Wraparound / Stoptail) 

El tipo de puente fijo viene en varias formas, versiones y nombres (Stoptail, stopbar, hardtail…) que, básicamente, consiste en una barra de metal que queda fija en la guitarra. En general se les conoce como Wraparound, que literalmente significa ‘enrollar alrededor’, ya que así es cómo se colocan las cuerdas en este tipo de puentes: enrollas las cuerdas alrededor. Un diseño sencillo suficiente para guitarras para principiantes por su bajo coste y su confiabilidad, aunque precisamente por su fiabilidad también se pueden encontrar en guitarras de alta gama.  Además, por estas mismas características es bastante sencillo de reemplazar en caso de ser necesario. 

Por el contrario, son puentes que no ofrecen muchas opciones de ajuste de la entonación, ya que esto se reduce a los dos pequeños tornillos que tienen en los extremos y que, claramente, no son los más precisos. Esto repercute en que los ajustes que se pueden realizar en la entonación son más bien ‘generales’, es decir, no afectan de manera individual a todas las cuerdas, sino a las dos mitades que abarcan cada uno de los tornillos. Evidentemente esto no es problema en los modelos más caros, ya que vienen perfectamente entonados. 

Es un diseño que proviene de los puentes de guitarra clásica, como se ve en sus dos postes y una pieza de metal. Un diseño antiguo pero efectivo, ya que consigue pasar mucha vibración fidedigna de las cuerdas al cuerpo, creando muchos armónicos. Hay que tener en cuenta que cada tipo de aleación (aluminio, bronce, acero inoxidable, etc.) transmite sus particulares características tímbricas. 

Por último, es un puente “fijo”, es decir, no se mueve, por lo que las opciones de producir vibrato con él son prácticamente nulas. Es posible hacerlo vibrar, pero a costa de una modificación compleja y costosa. 

Entre sus variaciones, la llamada Tailpiece es el diseño más sencillo: una barra de metal en las que se apoyan las cuerdas o con agujeros para que pasen en su interior. No se puede ajustar la entonación y no se puede hacer tremolo, pero son los más estables, resistentes y los que mejor pasan la vibración, aportando armónicos extra al sonido global.

Una variación de puente fijo, pero en forma de placa atornillada al cuerpo de la guitarra donde van incorporadas las selletas, es el conocido como Hardtail. La principal ventaja de este diseño es que la estabilidad de la afinación es muy buena. Normalmente vienen con selletas individuales (como en los modelos Strat) o en sets de pares (como en los modelos Tele o Precision en bajos). En los modelos Tele, por ejemplo, es normal que sobre la placa del puente ‘repose’ también una de las pastillas. 

Cuando vienen con selletas individuales te permiten ajustar individualmente la entonación de cada cuerda, así como la altura. Como única pega se podría decir que no se pueden instalar en guitarras tipo Les Paul y que no permiten una fácil conversión a puente tipo tremolo, es decir, un puente que permita más rango de balanceo para hacer el efecto tremolo con una barra. 

2) Tune O Matic

Este tipo de puente es una evolución del wraparound y fue diseñado por Ted McCarty para Gibson. Introducido en 1952 mantiene la barra de metal fija pero añadiéndole otra barra con piezas móviles, lo que permite ajustar la distancia y por tanto la entonación de manera individual. 

No sólo eso, el puente tipo Tune-o-Matic añade un ángulo que rompe la línea recta de las cuerdas, lo que permite más sustain. Hace un brazo de palanca creando más distancia entre las selletas y la parte trasera del puente, lo que crea más presión sobre el puente y, por tanto, más sustain y más armónicos. Este tipo de diseño es el estándar para los modelos Les Paul desde prácticamente su invención. 

A pesar de ser una mejora de los puentes fijos tipo wraparound, también tiene sus limitaciones. Por ejemplo, para ajustar la altura de las cuerdas sólo tienes dos postes a ambos lados del puente. Además, este tipo de puentes sólo puede usarse en radios de 12” o más planos, por lo que no sirve en radios más curvos como los de las Stratocaster (9.5”).

3) Tremolo

Este es un tipo de puente que te permite añadir expresión a tu ejecución gracias a su diseño ‘flotante’: es una placa metálica equilibrada sobre un punto de apoyo de dos puntos con las cuerdas pasando sobre las monturas del puente y hacia un bloque de trémolo dentro del cuerpo de la guitarra. Para sujetarlo y para compensar la tensión de las cuerdas se añaden unos muelles en la parte posterior de la guitarra (muy comunes en los modelos Strat, por ejemplo).

Esto consigue que el puente se mueva ligeramente por lo que es posible estirar más las cuerdas, lo que multiplica las posibilidades sonoras. Esta es su principal ventaja y su principal desventaja, ya que la contrapartida está en que la estabilidad de la afinación no es la mejor, debido precisamente a que las cuerdas se estiran más de lo normal en un tiempo muy corto. Además, puede ser complicado de ajustar.  

4) Vibrola

Aunque el puente tipo floyd rose parezca una gran innovación, en realidad hubo un diseño parecido mucho antes, conocido como ‘roller tremolo’, Vibrola o, más comúnmente ‘Bigsby’, por la empresa que lo popularizó. 

El diseño es sencillo e ingenioso. La placa metálica que funciona como puente es movida por unos muelles accionados por una palanca de tremolo, lo que produce un sonido oscilante (tremolo). 

Como es un diseño un tanto rudimentario, hay quienes consideran que no es tan estable como otros, y luego están los que dicen que no tienen ningún problema de afinación con ellos. Evidentemente esto tiene que ver con la forma de tocar y la calidad del propio puente, pero en términos generales no es tan estable como otros diseños de tremolo. Es por eso que muchas veces es aconsejable añadir llaves de bloqueo, lo que normalmente supone un coste extra. 

Es un tipo de puente muy común en guitarras tipo vintage, huecas y semi huecas, y en estilos como el surf rock o el rockabilly. En cuanto al aspecto, es un puente bastante voluminoso que (cuestión de gustos) nosotros creemos que luce genial, pero también podemos entender que haya quien no le guste tanto.

5) Puente flotante (Floyd Rose) 

Una variación más moderna del puente flotante, ya que es un diseño que ‘literalmente’ flota sobre la madera. Es decir, una parte del puente no toca la madera, dejando un espacio que es utilizado para estirar las cuerdas mucho más que en un puente convencional. Y esto produce unos efectos impresionantes. Si te gusta la música de guitarristas de los 80 y 90 como Van Halen o Steve Vai sabrás de lo que hablamos. 

Evidentemente, un estiramiento de cuerdas tan brutal como el que permite este tipo de puentes produce unas desafinaciones igual de brutales. Es por eso que este sistema suele ir acompañado de lo que se llaman ‘locking nut’, es decir, cejilla de bloqueo para asegurar que las cuerdas no se desafinan. 

Esto supone una ventaja (estabilidad) pero también la desventaja de que, en las ocasiones en las que se desafina, es bastante engorroso de ajustar. Y cuando decimos bastante, nos referimos a bastante. Cualquier arreglo, cambio de cuerdas o ajuste añade un extra de trabajo que no hay que desdeñar. Pero oye, si quieres ir más allá en tu sonido y tu forma de tocar, es lo que toca. 

Conclusión

Esperamos que este artículo te haya ayudado a conocer un poco más sobre los puentes más comunes disponibles en el mercado, cómo funcionan y qué ventajas y desventajas tienen. Si estás buscando un reemplazo para el tuyo, información o consejo, estaremos encantados de ayudarte. Simplemente escríbenos usando la página de contacto. Y si te ha gustado el artículo, no olvides compartir y suscribirte a nuestra Newsletter más abajo.